Me afiancé en la península creyendo que mi inseguridad para la toma de algunas decisiones eran parte del pasado.
Sin embargo,tras un encuentro conmigo mismo el día de hoy decidí que mi vida podrá estar de este lado, pero mis principales motivos para vivir están del otro lado de la ciudad.
Lo descubrí mientras le hacía cosquillas a mi hermano Alejandro, quien con su risa me demostró necesitar de su segundo hermano mayor en casa a estas alturas de su corta vida, al igual que la pequeña Nicole, mi otra hermana quién en breve dejará de ser pequeña, pero que para mí siempre será esa niña que ilumina mi camino desde su llegada en 2001.
Hoy descubrí que mi familia está del otro lado.
Hoy descubrí que mi bien está en Lima y no cerca al mar.
No se lo he dicho a mi madre aún, pero volveré para permanecer por lo menos el siguiente semestre en aquella casa que tan nuestra es.
Mi mami (nunca le digo mami, pero hoy tenía ganas) lee usualmente mis escritos, pero no sé si su poca habilidad en el manejo del internet le haya hecho descubrir este espacio y le permita leer lo que vengo escribiendo.
Que mi hermano Félix, mi compañero de alcoba, se entere que pronto volverá a sentir mi respiración con problemas bronquiales los siete días de la semana.
Que alguien le diga a Doña Luisa, nuestra cocinera, que dentro de poco tendrá que cocinar nuevamente un plato más en el almuerzo para mí y que la ropa sucia volverá a estar detrás de las puertas con mi llegada.
Que le digan también a Gustavo, mi padrastro y gran amigo, que en breve llegaré para continuar con nuestras interminables conversaciones sobre política y educación en el país.
Que le digan a Luise, Walter, Carlos y compañía que ni bien llegue tendré ganas de ir a "La Loma" a conversar junto a las barras y luego matar el hambre en el hueco más cercano pensando que nunca me fui.
Hasta la primera o segunda semana de Marzo familia y amigos...
Metafórico Intenso. El Autor - Renzo F.
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