Yo no era un buen jugador, pero era el mejor hincha.
No recuerdo en que puesto quedamos en aquel campeonato que ilusamente creímos poder campeonar y que se desarrolló en la canchita del Regatas Unión en La Punta.
Sólo recuerdo a algunos muchachos haciéndola de fulbiteros durante 30 minutos (así duraban los partidos).
Alonso se paraba en la zaga y trataba de imponer su superioridad en peso ante los amagues de cualquier habilidoso.
Franco, el primo de Alonso, era su compañero en la zaga. Con Franco las jugadas siempre terminaban en un despeje.
Coco era nuestro arquero, capitán, presidente, fundador y demás por haber tenido la idea de formar nuestro primer elenco, de nombre "Deportivo Malecón".
Giuseppi comenzaba a dejar en claro que tenía un buen juego aéreo sobre todas las cosas y que no le tenía miedo a los codos, cabezasos y similares.
Suito era quién ponía la pausa a tanta locura dentro del campo.
Koki era el alma del equipo. Era el "10" menos papeado del campeonato, pero el más alentado por la tribuna.
Javier o Javo tenía las manos en los pies. Su buen trato de pelota me hicieron tratar de colocarlo en el fútbol profesional en más de una ocasión. No logré mi cometido y me di cuenta que a Javo le caía mejor ser una eterna promesa que una estrella.
El que escribe, Rafo, Chenta, Roger y algunos deportistas fracasados más éramos los encargados de poner la bulla y presión al equipo rival.
El cholo Marrú trataba de ser el entrenador cuando el trabajo se lo permitía.
No campeonamos, pero aprendimos a ser los mejores amigos del Mundo.
No campeonamos, pero prometimos volver a intentarlo...
CONTINUARÁ....
Metafórico Intenso. El Autor - Renzo F.
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